Baidu aprovechó su conferencia anual Baidu World para mostrar una nueva oleada de hardware diseñado para elevar la capacidad de computación nacional. El movimiento encaja en un contexto evidente: las restricciones de EE. UU. a la exportación de chips avanzados han obligado a las tecnológicas chinas a depender menos del exterior y a reforzar su producción doméstica. Baidu, que desarrolla procesadores desde 2011, quiere situarse en la primera línea de esa transición.
M100 y M300: los chips que apuntan a 2026 y 2027
La compañía presentó dos procesadores propios. M100, centrado en tareas de inferencia, llegará al mercado a comienzos de 2026. M300, orientado tanto al entrenamiento como a la inferencia, está previsto para principios de 2027.
El entrenamiento construye modelos a partir de grandes volúmenes de datos; la inferencia los aplica para generar respuestas en tiempo real. Con esta dupla, Baidu busca cubrir el ciclo completo del desarrollo de modelos de IA. ¿Puede una estrategia así reducir la dependencia de tecnologías externas? Esa es la apuesta.
Supernodos: computación distribuida para sortear límites
La compañía también mostró dos productos tipo supernodo, infraestructuras que conectan cientos de chips mediante redes de alta velocidad para compensar limitaciones de rendimiento individuales. Este enfoque ya es una prioridad en China.
Huawei, por ejemplo, opera CloudMatrix 384, un sistema con 384 chips Ascend 910C que analistas del sector consideran más potente que uno de los sistemas avanzados de Nvidia, el GB200 NVL72. La firma prevé ampliar esta línea con nuevos supernodos.
En paralelo, Baidu lanzará Tianchi 256, compuesto por 256 chips P800, en la primera mitad del próximo año. La versión ampliada, con 512 chips P800, llegará en la segunda mitad, ampliando la capacidad de cómputo disponible para empresas locales.
Una hoja de ruta que apunta a la autonomía tecnológica
En software, Baidu mostró una nueva versión de Ernie, su modelo de lenguaje de gran tamaño. La empresa explicó que ahora no solo procesa texto con mayor precisión, sino que incorpora análisis de imágenes y vídeo, siguiendo la tendencia hacia modelos multimodales capaces de manejar varios formatos a la vez.
La combinación de nuevos chips, supernodos y modelos más completos refuerza la estrategia de Baidu para ofrecer computación avanzada dentro de China. La compañía quiere consolidar una infraestructura local capaz de sostener su ecosistema de IA en un escenario de restricciones y competencia global creciente.
