El Campus de Google en Madrid, inaugurado en 2015 como epicentro para startups y emprendedores, cerrará sus puertas a finales de 2025. La compañía explica que la decisión responde a un cambio estratégico: en plena era de la inteligencia artificial, quiere centrar sus esfuerzos en programas globales y acceso directo a sus productos y expertos, más que en un espacio físico.
Durante esta década, el Campus se convirtió en uno de los lugares más reconocibles de la comunidad tecnológica española. Allí nacieron eventos que hoy son referencia y cientos de encuentros que unieron a fundadores, inversores y mentores en un mismo auditorio. “Campus Madrid nunca fue solo un edificio, fue un movimiento”, resumió Google for Startups en su comunicado oficial.
Un balance de impacto
El legado del Campus se mide en cifras:
- +700 startups españolas participaron en sus programas de aceleración.
- 2.600 millones de euros levantados en financiación por esas empresas.
- 8.700 empleos creados dentro de su comunidad.
Fundadores como Andrea Barber, de Rated Power, recuerdan que “la comunidad de GFS Campus fue lo más valioso: un sistema de apoyo al que podíamos acudir en cualquier momento”. Para José María Lillo, de Idoven, el paso por el Campus marcó un antes y un después: en 2019 eran solo tres personas, hoy son un equipo de 58.
De la pandemia a la nueva era de la IA
La pandemia de 2020 obligó a cerrar las instalaciones y replantear el modelo. Google descubrió que podía llegar a más emprendedores sin estar limitado a un edificio, escalando así sus programas de formación y mentoría. Ese fue el germen de la transformación actual.
El futuro pasa por iniciativas como el Gemini Kit, los API Sprints de inteligencia artificial, el Gemini Founders Forum o el Google for Startups Cloud Program, con beneficios de hasta 350.000 dólares para startups de IA.
Un cierre con sabor a comunidad
El anuncio del cierre ha generado mensajes de nostalgia en la comunidad tecnológica. El fundador de la Bonilista, David Bonilla, recordaba en X cómo el auditorio del Campus albergó la primera edición de la Tarugoconf: “Nos sentíamos tan en casa en el Campus que jamás quisimos irnos de allí”.
Ese sentimiento resume lo que supuso el espacio para una generación de emprendedores: un lugar donde las ideas se transformaban en proyectos y donde la comunidad se sentía parte de algo más grande.
Con el cierre físico, Google insiste en que no desaparece el compromiso: seguirá apoyando a las startups españolas, pero ahora con un alcance global y con la inteligencia artificial como motor de la próxima década.
Imagen | Wikipedia, autor: Yandrak
